Veinticuatro años después, la guerra ha llegado a su fin. El Parlamento Europeo (PE) ha aprobado el 14 de marzo el aumento de las importaciones de carne de vacuno procedentes de Estados Unidos, un paso definitivo hacia el fin de la disputa comercial que Bruselas y Washington mantienen desde hace décadas, originada por el veto comunitario a la carne con hormonas.
La decisión, que logró 650 votos a favor, 11 en contra y 11 abstenciones y cuenta con el visto bueno del Consejo, permitirá incrementar a partir del próximo agosto el cupo de carne de vacuno de alta calidad importada desde Estados Unidos y Canadá, que pasará de 20.000 a 48.200 toneladas anuales.
La carne procedente de animales tratados con hormonas seguirá vetada del mercado europeo. El acuerdo reportará a España unos 7 millones de euros, según fuentes del PE. Todos los grupos políticos de la Eurocámara valoraron la decisión adoptada. “Hoy termina por fin la vieja disputa comercial. Es una medida favorable para la UE. El Parlamento ha tomado una decisión que permitirá a la industria agrícola planificar con más antelación y estrechar los lazos comerciales transatlánticos”, dijo la diputada del Partido Popular Europeo y ponente del informe votado, Godelieve Quisthoudt-Rowohl. El eurodiputado socialista George Cutas valoró el paso dado, pero alertó a la UE de la necesidad de “mantenerse vigilante y pedir garantías claras de que las importaciones cumplen los estándares europeos de seguridad alimentaria”. Por su parte, José Bové (Verdes) consideró satisfactorio que el litigio se cierre “sin que la UE haya tenido que modificar los estándares sanitarios que aplica para proteger a sus consumidores”, y animó a presionar para que esos exigentes criterios se apliquen a nivel internacional.
El voto de hoy se enmarca en los acuerdos provisionales alcanzados con Estados Unidos (2009) y con Canadá (2011) por el que ambos países se comprometieron a retirar progresivamente las sanciones que aplican a las importaciones europeas en represalia por la prohibición de la UE a la carne con hormonas del crecimiento. Fuentes europeas calculan en 190 millones de euros el impacto de esas sanciones.
A cambio, la UE aceptó permitir la importación de una cuota de carne de vacuno de Estados Unidos y Canadá sin gravarla con aranceles. El comisario europeo de Agricultura, Dacian Ciolos, dijo ayer en el debate previo al voto que confía en que la apertura de las importaciones “conduzca a una resolución definitiva de las diferencias” entre las partes.
La disputa por las hormonas ha sido uno de los contenciosos comerciales principales entre Bruselas y Washington. Los principales beneficiarios de la eliminación las sanciones serán Italia (con el acuerdo obtendrá 75,3 millones de euros), Polonia (19 millones), Grecia e Irlanda, (24 millones de dólares cada uno), Alemania y Dinamarca (18 millones cada uno), Francia (10 millones) y España (7 millones).
Fuente: Agromeat
La disputa por las hormonas ha sido uno de los contenciosos comerciales principales entre Bruselas y Washington. Los principales beneficiarios de la eliminación las sanciones serán Italia (con el acuerdo obtendrá 75,3 millones de euros), Polonia (19 millones), Grecia e Irlanda, (24 millones de dólares cada uno), Alemania y Dinamarca (18 millones cada uno), Francia (10 millones) y España (7 millones).
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